28 de noviembre de 2012

De engendros, Mozart, danzarinas y literatura insólita

La tonta del boteJohn M. Darkview

Tío, taba yo la mar de agustito con mi tarea y ha venío la botarate de los servicios generale, la Otilia, y ma cortao er orgasmo laborá. Po no le mandao un mensaje elestrónico a to la gente pa comunicá que er vierne é la comida de despedía der Alfredo Peres, y la tontarbote ve que le llega mi correo, se levanta, se viene a mi mesa y mu misteriosa me pregunta:

― ¿Tú me has mandao un correo?

Pero no te lo pierda: le contesto que sí, que se lo mandao a tor mundo, y se me quea mirando asín con cara de pescao y me pregunta:

― ¿A mí?... Bueno, entonse… lo leo, ¿no?

Hestao a puntito de disirle:

― No, no lo lea, mejón te lo mete en er culito…

Tío, no pueo, no pueo…

Jack Lawyer

Testás tú ganando ahí la gloria. Esta empresa se lo debe to a tu pasiensia. Cuarquié día los jefes te regalan unas meresidas entradas par úrtimo espestáculo der Chiquito de la Carsá…

John M. Darkview

¡Yastá, tío, yastá! Me has ayudao a resorvé er enisma. Con la camisa que trae hoy puesta este engendro taba yo pensando que se paresía a arguien, y no caía. ¿Cómo no me di cuenta ante, con esos movimientos tan claritos y espesiales? Aro, er Chiquito, ¡é mismamente la hija esaboría der Chiquito de la Carsá y de la Virgen der Rosío!

Jack Lawyer

Por dio, eso no lo podría permití la propia naturalesa… Un espantajo asín estropearía er eje de la tierra o soliviantaría er masma susterráneo. So nos posible, tío…

John M. Darkview

Que sí, que sí, como te lo cuento…

Wolfgang-amadeus-mozart_1Sisque a mí me pasan unas cosas… Si viera er portergueis que me ocurrió er otro día… Er vierne fui a una obra de teatro que mabía recomendao er José Julio, er de Fasturas, que tú sabe lo pesao que é con la astualidá curturá. Me recomendó una obra de la que ya mabía hablao antes, y ta claro que yo no hubiera ío si no hubiera yo tenío otras opinione má favorable par asunto. Como, ademá, duraba namá que media hora y er vierne tenía yo la tarde tranquilita, pos allí me planté, en er Teatro Sentrá. La obra se llamaba Réquiem, y tenía música der Réquiem der Mósar. Era una obra de dansa contra la guerra. Reconosco que yo iba con la mosca detrá de la oreja, porque tú verá, to tiene relasión con to, pero la obra der Amadeus está má inspirá en la muerte en sí que en er tema bélico, pero güeno. La cosa é que llegué ar teatro y cuando menteré que eran dies leuretes der ala, por media hora, me dije: eh, tate... Pero ya questaba allí, entré.

Er lugá de autos no tenía ni asiento, ni gradas, ni na de na. Era una construxión de planta cuadrá, con tre niveles, y en medio, sobre er suelo, un tapete blanco donde iban a bailá los notas. Arrededó unos andamios donde se suponía que tenía questá er público asistente. Había pasillos donde se colocaba la audiensia, de pie, y miraba desdarriba er espestáculo. Aquello se movía como toa su fruta madre, y paresía que dun momento a otro siba a caé. Arguien mabía disho que se veía mejón desde la úrtima planta, pero ar subí había gente que siba corriendo pabajo porque le daba vértigo la artura y la inestabilidá.

Y vértigo fue lo que yo sentí cuando salieron las do primeras chavalitas que iban a bailá, una rubita y otra morena (ésta má mayorsita pero con un morbaso...). Niño, a cuár mejón, tanto que no podía yo desidirme por ninguna de ellas. Fue curioso, porque ante de empesá a bailá estuvieron sentás ar borde der tapete, y en cierto momento una le dijo argo a la otra señalando pa donde yo estaba. Claro, yo tenía a dos o tré mendas que podían sé er destino de aquer deíto delisioso, pero miré a mi arrededó y no vi a nadie con una pinta tan carasterísticamente cañí como la mía. Nostante, pensé que yo no las conosía de na, y que en to caso podía sé que mubieran confundío con un artista.

DanzaEntonses comensó... aquello. Er equipo de sonido que tenían era der carajo, y cuando sonó la primera piesesita der Réquiem casi me da una subida dasúcar. Menos mar que to lo que jasía la rubita aquella en er essenario no tenía na que ve con er Réquiem, y por eso pronto empesé a debatirme entre la oscura muerte de Mósar y la masisés parmatoria de la niña, vestidita de blanco, con las formitas bien delineás, y pegándose una dansa loca que estimulaba los mecanismos más verdes de mi maginasión. Lo más curioso e que to los bailarine (tres tías y dos tíos carvos y mu grandes y mu feos) tenían la consirna de bailá mirando a la gente, de mirá a la gente con descaro, pero la rubita namá que hasía mirá pa donde yostaba, y taseguro que ara sabía con sertesa que era a mí a quien miraban. No cabía duda, mabían confundío con arguien. La prueba irrefutable vino cuando salió la morena, e jiso sastamente lo mismo. Y otra prueba ad absurdum vino de la tersera tía, no tan masisa, y que no había estado ante de empesá con las otras do, porque ésa miraba pa tos laos por iguá, y lo mismo hisieron los tíos.

Totá, que cuando me quise da cuenta, er Réquiem fluía por mis vasos linfáticos, produsiéndole un cosquilleo a mi arma. Y como yo soy murtitarea, aquellos do cuerpesitos impresionantes tamién fluían pero por otros condustos der mio córpore, eso sí, sin na que ve una cosa con otra, porque la guerra y las fotillos de barbaridade que proyestaban sobre er tapete de ves en cuanto, o esos truquitos con los que pintaban sangre sobre los bailarine, no tenían na que ve con er lamento der Mósar. En fin, una horterá la má de moderna. Arguna gente, ar salí, coinsidió cormigo en reírse daquello, y en desí que aquello era una payasá sin trassendensia. Verá tú, los bailarine eran tos unos asletas, pero er nota que había consebío la obra era un cara de cuidao. Y allí me fui yo, dudando si llevarle un ramo de flore a cada una de las shiquillas...

Tú verá cuando me pregunte er José Julio y le diga yo que me paresió una mierda mu gorda…

Jack Lawyer

Na comparao con lo cacabo de escucharle a mi jefa. Te lo transcribo, asvirtiéndote que los tres puntos suspensivos suponen pausas de entre 5 a 15 segundos:

(Dirigiéndose ar Ricardo) ....Uyyyy, le he pagado a Manolita una cosa y, qué te cree, no me ha devuerto er cambio.... Uy, sa quedao con 60 euros... Uy, uy, 60 euros, 60 euros... Bueno, no, qué digo, han sido 60 séntimos... Bueno, 60 séntimo no es musho... Bueno, sí, sí es... Bueno, Ricardo, ¿cuánto es 60 séntimos...? (...) ...Ah, no ¡que sí le cogí er cambio!

Y mi compi de enfrente lleva dos horas relatando por teléfono. É incredíbile. La frase má inteligente que ha disho a sío argo asín como: "uyuyuy, yo si fuera tú no permitía eso... con lo que tú ere...”.

Toy por recomendarle las conferensias que vi anunsiás ayer:

Conferencias con el psiquiatra y teólogo D. Tal Tal y Tal…

Los próximos días 30 de noviembre, 1 y 2 de diciembre a las 20:00h tendrán lugar en el salón de actos de la Caja Rural de la Plaza de la Magdalena (Sevilla) las conferencias bajo el tema general

Ciencia y Biblia.

Día 30: Ciencia y Religión.

Día 1: La Biblia y los enfermos mentales.

Día 2: El Psicoanálisis desde el punto de vista científico y teológico.

Las conferencias serán muy interesantes, así que os animo si no tenéis nada mejor que hacer.

locura Quino

John M. Darkview

Oye, po si nos hasemo psiquiatra-teólogo ponemo en la empresa un shiringuito y seguro que nos forramo, porque aquí hay cantidá de gente que con la sicología convensionar no tiene remedio…

Jack Lawyer

¡Quillo, calla, que acabo de descubrí dos enormes e inéditos tesoros, dos incunables der maestro de los maestros de la literatura insólita patria! Uno de ellos se entitula La musa der Paraíso, relatos de la historia de una adolescente-mujer en los años de albur en sus aspectos generales (¡impresionante, tiembla Les Luhtiers!), der que abro sus prolíferas y preñadas 168 páginas al asá, te lo juro, y leo:

Y, así como la autoestima se confunde a veces con un sentimiento de superioridad, así también la conducta asertiva se confunde con un comportamiento agresivo hacia los demás. Lo cual no es cierto.

Y tamién:

Vivimos pues, en un mundo de zozobras y de controversias, lamentablemente no siempre ocurre esto, por lo que, sin lugar a ningún género de dudas nos extrañan algunas novedades.

OrfanatoLa segunda perla que he encontrao se titula En aquellos lugares....años de la niñez y adolescencia, en la que, mu emosionao, nuestro maestro relata su infancia desgrasiada en un hospisio, y der que, al igual que el anterió, te puedo extraer lo siguiente:

...resumir los últimos estudios, de poner al día las líneas de investigación personal; de la monotonía que quedó atrás en mi vida, soslayando cualquier tipo de contingencia que me llevara a imponer y marcar la pauta que me había propuesto sin quebrantar un ápice de los momentos de mi infancia-adolescencia.

O cusha, cusha esto:

Asimismo, expertos de la literatura, serios de todas las procedencias, coincidencia que acabará por arrumbar, esperemos que para siempre a los retrógrados portavoces de la propaganda que se hizo de todos los signos. Por supuesto que estos recalcitrantes intrusos que fueron los celadores en aquel lugar..., no acababan de resignarse a su ostracismo y trataban de mantener, cada vez en mayor soledad, el prolongado y vergonzoso monopolio interno que, durante mucho tiempo enturbiaron la verdadera historia de uno de los periodos más dramáticos y más aleccionadores en la vida de este viejo país de Occidente.

O esto:

Lamentablemente, tengo que decir que, siempre fui incomprendido y lo he dicho en más de una ocasión.

Ésta, ésta:

Modestamente quiero decir de que quien estas líneas escribe, no tuve la suerte de pasar por la Universidad hasta 1.993 en la que me formé en distintas facultades como Derecho Internacional Público y Privado y Lengua y Literatura en cursos de perfeccionamiento.

Incluso llega a proferí:

¡Qué lástima me da hasta darme lástima!

Tío, ya verá tú que los Gomaspuma no son originale…

John M. Darkview

Pera que me seque las lágrimas, tío, questoy mosionao. Onque bien pensao, pa qué me las via secá si esta tarde, cuando lea esos testos que tú me vas a pasar irmediatamente, no via pará de llorá... Esto sí que no te lo via yo podé pagá nunca con na...

Jack Lawyer

Tío, esto e su obra cumbre... No te transcribo nada má, porque tendría que mecanografiarte la obra entera.

Pera, pera, que ésta e esersioná:

No cabe la menor duda que el rompecabezas de entonces, existía un cierto hermetismo en su entorno, su capacidad de mujer negociante era una prueba de reválida para obtener un sobresaliente y aprobó.

¡Bravo! Illo, esto e un manantiá inagotable:

Ella magníficamente dirigida por su extinto padre al cual nunca conocí.

Si cada hombre curara a otro hombre el mundo estaría más sano si cabe.

Lo que mata fortalece.

John M. Darkview

Quillo, ya, que no paro de llorá... Yasta bien, por dio...

Jack Lawyer

Otros, partieron por derroteros diferentes; ellos también sufrieron durante su etapa infantil-adolescencia le hizo mella las vivencias obtenidas que, hoy, adultos y libre de ataduras enderezaron sus vidas a su antojo y semejanza.

Esto no tiene presio... Y mira esto:

Vivía por aquel entonces con mi madre extinta...

Como er de Sicosis… Sea como fuere, siempre se aprende de los grandes maestros.

John M. Darkview

Sasto, sasto. Sobre todo de los grandes maestros de la literatura y der deresho internasionar juridico-asministrativo.

Jack Lawyer

Eso, eso, también e insuperable cómo mescla a la perfesión la oda poética con la narrasión novelesca y con er lenguaje de instansia administrativa.

John M. Darkview

Tiene una sintura que no he visto en ningún otro escritó de renombre y tronío. E lo que te digo, cuarquié amante de la literatura, y musho má cuarquié monstro escritó valoraría estos testos en lo que valen... en sus aspestos generales, aro.

Jack Lawyer

Sin comentarios:

...aún se conserva el edificio (hoy demolido)...

Y refiriéndose a una monja que por lo visto le quitó a una niña la merienda y la dejó en ridículo:

En visita efectuada a la comunidad religiosa donde se encuentra internada por su incapacidad física, reconoce el hecho que fue así por no existir entonces una educación de esta tipología que muchos eruditos llamarían 'holocausto infantil'.

No se sabe si é la monja o la niña. Otras frases jugosas de esta historia:

Castigados por su genio creo que no era para tanto.

¡Qué dominio de los diferentes registros y del lenguaje diresto!

Ello supuso un enorme handicap de preocupación ya que desde entonces hasta nuestros días, jamás se supo de aquella criatura.

Aquí quizá convendría precisar como el de Les Luthiers: "bueno, yo al menos no supe nada...". Y qué me dises de éstas:

Era toda una efemérides conservar el tipo y el aspecto físico...

Creo sinceramente que, hubo que vivirlo para poder contarlo para creerlo, no más lejos de la realidad.

Todo tiene un ciclo de tiempo en la vida según desde la óptica en que la miremos, y, al final lo que verdaderamente expresamos, nos dará la razón y, esto es evidente.

John M. Darkview

Várgame San Masedonio Fernández…

Macedonio Fernández